domingo, 3 de abril de 2011

PANORAMA GENERAL DE COMPETITIVIDAD EN COLOMBIA

Al enfocarnos en competitividad microeconómica, tenemos claro que quienes compiten realmente son las empresas nacionales y no los países. Sin embargo, las políticas de Estado integran a las empresas nacionales por medio de organismos como el CONPES el cual actúa como máxima autoridad nacional de planeación y de todos los aspectos relacionados con el desarrollo económico y social del país, contribuyendo a la inclusión y modernización del desarrollo empresarial nacional permitiendo a las empresas su efectiva inserción en los mercados internacionales al igual que se creó el Sistema Nacional de Competitividad que ha fortalecido la institucionalidad de la competitividad en el país y en la cual trabajan de manera coordinada el sector público y el privado.



Aunque nuestro país sea uno de los más ricos en biodiversidad le falta bastante para llegar a estar dentro del primer tercio de los países más competitivos del mundo, así es, desafortunadamente, según la última versión del reporte de competitividad del World Economic Forum (el cual involucra a líderes empresariales, políticos, intelectuales y sociales de todo el Orbe), somos un país mediocre en términos de competitividad, los factores de mayor preocupación según este estudio son las instituciones y la Eficiencia de los Mercados de Bienes, ocupando el puesto 103 de 139 países, a pesar de los "importantes" avances realizados por la última administración, el entorno institucional se sigue caracterizando por las deficiencias en el puesto 103, otro estudio que nos muestra las debilidades de Colombia en cuanto a competitividad es el Doing Business –estudio del Banco Mundial- analiza las regulaciones que influyen en cada ciclo de su existencia y resalta dos factores considerados por los encuestados como los mayores obstáculos para hacer negocios en Colombia los cuales son la corrupción con un 16.6% y la ineficiencia de la burocracia gubernamental 10.7%.

Si el gobierno pretende mejorar su posición en el WEF, deberá empezar por implementar cambios profundos en la forma en que funciona el Gobierno en los diferentes poderes, así como en las dimensiones nacional, departamental, municipal y especial. Requiere encontrar formas de gobernar para defender el interés común, evitando la "captura" por parte de grupos de presión e intereses particulares, como lo indica el Sr. Luis Fernando Andrade –columnista de la revista Dinero- , ya que la inestabilidad política, la corrupción, las restricciones laborales y la ineficiencia burocrática son los cuatro factores que los ejecutivos de las empresas del país consideran como los más sensibles a la hora de invertir ejemplo de ello se ve reflejado en la contratación de las obras públicas en Bogotá la cual se ha convertido en símbolo de corrupción y numerosos escándalos políticos la cual podría terminar enredando la discusión del proyecto de modernización fiscal y afectar a más de una empresa.
Por último es fundamental la toma de conciencia sobre la importancia en estos momentos de llegar a competir en las  empresas no solo por precio sino por valor agregado y productividad, porque si no es así,  la firma de TLC con países desarrollados podrían acabar con nuestras empresas nacionales.
Una de las más grandes razones de nuestro atraso en competitividad (la corrupción)

sábado, 2 de abril de 2011

RESUMEN DEL CONVERSATORIO DE COMPETITIVIDAD

¿Cuál es el concepto de competitividad en diferentes partes del mundo?


Con ésta pregunta partió el primer conversatorio, donde se expuso las distintas definiciones sobre competitividad basadas a nivel microeconómico y macroeconómico, con el fin de identificar la importancia y el uso de este concepto en la creación de nuevos mecanismos, procesos, y/o productos para generar competitividad tanto microeconómica como macroeconómica, basados en análisis del  reporte anual de competitividad que  realiza Foro Económico Mundial el cual se expuso a lo largo del conversatorio, donde se explicó que a pesar de que nuestro país sea uno de los más ricos en biodiversidad le falta bastante para llegar a estar dentro del primer tercio de los países más competitivos del mundo, debido a la corrupción, infraestructura, inestabilidad política, y la falta de institucionalidad del país, lo cual no ha permitido que las empresas puedan explotar su potencial a pesar de las ayudas de emprendimiento, innovación y los diferentes sistemas de competitividad e incentivos que reciben por parte del gobierno .

Después de hacer un breve resumen de competitividad y tocar temas centrales tales como: la importancia de la competitividad en las empresas,  ranking de competitividad mundial, y ¿Colombia es país competitivo? pasamos a nuestra última pregunta de integración y/o participación.

¿Qué características tienen las empresas que se clasifican como “de talla mundial?

Donde el profesor Alejandro Martínez  hizo un análisis de temas como: innovación y educación, según él son los puntos críticos por los cuales Colombia  se rajó en competitividad, mencionando ejemplos como el  costo de producción en nuestro país y el costo de producción de  países desarrollados como EE.UU, la diferencia es de un 80% al realizar la comparación, donde afectaría directamente a las empresas nacionales sí esos mercados decidieran entrar al nuestro, al igual que menciono lo grandes y complejas que son las pequeñas y medianas empresas de los EE.UU a comparación con las de nuestro país y argumentó que  la innovación y la creación de nuevos procesos generan la ventaja competitiva frente a otros mercados; por tal razón EE.UU se encuentra en el segundo escalafón del informe de competitividad 2010-2011 ya que quienes compiten realmente son las empresas nacionales y no los países.

Con respecto a la educación mencionó que es el factor clave para el crecimiento del país, pero lastimosamente en Colombia hay gran cobertura pero no de calidad, y  las universidades del país les falta incentivar la investigación en los estudiantes, para generar un valor agregado a éstas y recibir dinero por dichas investigaciones como lo hacen las universidades de  Harvard, Oxford, Stanford etc..

BALANCE GENERAL DEL GOBIERNO DE ÁLVARO URIBE VÉLEZ

Basado en el artículo de la revista Semana.com: Soñar no cuesta nada, en el artículo de la revista Dinero.com: Balance de algunos aspectos de la era Uribe y por último en  El Consejo Nacional de Planeación, su informe ‘Reflexión para la planeación, Balance general del Plan Nacional de Desarrollo 2006-2010

En el informe reflexión para la planeación, realizado por el Consejo Nacional de Planeación se hizo un balance general del plan nacional de desarrollo 2006-2010 el cual evaluó la ejecución del Plan Nacional de Desarrollo Del gobierno de Álvaro Uribe sus logros y tareas pendientes de gobierno en materia de educación, economía, medio ambiente, desplazamiento y pobreza. Encontrando que a educación ha disminuido en aras de cobertura, el gobierno cumplió con los indicadores en temas como el crecimiento económico o la cobertura de la educación pero la ejecución del Plan Nacional de Desarrollo no responde a las “necesidades reales de la ciudadanía” como lo menciona el Consejo Nacional de Planeación. 

Basándome en su plan de gobierno donde planteaba que cumpliría unas de sus metas en el 2010, en 2014 otras, y las finales, para 2009, año en el que Colombia debería estar, completamente pacificado y salido del “club de pobres” lastimosamente los resultados hoy en día no son los esperados su prioridad era el aumento de la inversión extrajera, por eso su principal prioridad fue derrotar a las FARC y su eslogan siempre fue la “SEGURIDAD DEMOCRÁTICA”, aunque se logró más que la inversión deseada (aspiraba a 25 por ciento del PIB y obtuvo el 27 por ciento), el modelo que se consolidó conspira contra otras de sus metas, pues está basado en el auge de la minería y el petróleo. Es decir, sectores donde prácticamente no se genera empleo. Si a eso se suma que para llegar a ese punto el gobierno tuvo que subir el gasto militar a niveles insospechados y que la se le fue la mano en exenciones tributarias a los inversionistas, lo que queda es un modelo que cojea, porque privilegia el capital por encima del trabajo aparte de que las regalías que recibe por la explotación de esos recursos son mínimas y no se cubren los daños ambientales y sociales que ocasiona. 

El desempleo según lo proyectado debía estar en 8,6 por ciento y sin embargo está en el 12 por ciento; superar la pobreza era un aspecto crítico y, sin embargo, hoy se está en el mismo punto que en 2004, en 45 por ciento, cuando, según los cálculos, debería estar en 33 por ciento. De hecho, Uribe se proponía bajar la indigencia al 12 por ciento pero esta permanece en 17 por ciento, y en cuanto a cerrar la brecha entre ricos y pobres el gobierno se rajó sin matices. En lugar de bajar a 0,52 por ciento, como se quería, subió a 0,58, dos puntos más de la situación anterior. Más grave aún si se tiene en cuenta que durante un lustro se creció por encima del 4 por ciento, se vendieron importantes empresas del Estado y hubo ganancias extraordinarias por los precios del petróleo; todo esto se desaprovechó para generar una verdadera distribución de la riqueza. 

En el tema de seguridad, si bien hay muchos logros ya conocidos, pero el Gobierno dijo que recuperamos la inversión extranjera debido a la seguridad. Pero el año en que más golpes recibieron las Farc, el 2008, fue el año que menor inversión hubo de todos los del Gobierno. O sea que esa relación no es tan cierta, además para 2010.
Los homicidios debían estar en 21 por cada 100.000 habitantes, y sin embargo, están en 37. Esta cifra es un avance respecto a la tasa de 45 que había en 2004, pero está lejos de lo que se había pronosticado. También el Plan presupone que en 2010 habría cero matas de coca en el país, y cero familias dedicadas a cultivos; que los narcos estarían reducidos a la mitad y los guerrilleros se irían desmovilizando de a uno. Nadie sabe de dónde salió esta cifra tan absurda. 

En realidad en los dos últimos años los cultivos han disminuido un 20 por ciento pero aún quedan 80.000 hectáreas. Mucha gente siguió en la ilegalidad por falta de oportunidades. 
Otros temas como lo de las tierras, infraestructura y pensiones. Para 2010 debían haber sido adjudicadas 205.000 hectáreas de extinción de dominio para proyectos de agricultura. En realidad se han extinguido más del triple, pero una tercera parte ha vuelto a manos de sus antiguos dueños y hasta finales del año pasado solo se habían adjudicado 50.000 hectáreas de estas. Es decir, una cuarta parte del pronóstico, ahora hay que esperar a ver si con el nuevo plan de Santos y Petro se dé la restitución de tierras. El gobierno aumentó el número de afiliados al sistema de pensiones y eliminó los más de cien regímenes especiales que existían en el país. Sin embargo, el pasivo pensional sigue representando un gasto muy grande para el país 



La infraestructura es el gran talón de Aquiles. Se debieron haber construido 1.200 kilómetros de vías de alta capacidad y calidad. Solo se logró construir la mitad, de las cuales hay entregadas únicamente 181 kilómetros de dobles calzadas. Pero hay firmadas concesiones por más de 4.000 kilómetros. El haber privilegiado las vías secundarias, como hizo Uribe en el Plan 2.500, si bien puede parecer un acto de equidad con las regiones, en realidad no resolvía los problemas estructurales ni la competitividad del país y cabe aclarar que parte de los problemas de infraestructura se debe a la corrupción en la licitación o contratación del estado con empresas encargadas de realizar las respectivas obras generando un atraso económico en el país. 

Adicionalmente se esperaba que el 60% de los aeropuertos estuviera para esta época funcionando en excelentes condiciones, lo cual está muy lejos de ser una realidad. Basta ver los problemas que ha tenido El Dorado en Bogotá.


En educación, a pesar de los logros en cobertura, sigue habiendo un gran embudo para los jóvenes que terminan secundaria, que son 300.000 cada año, de los cuales apenas 60.000 acceden a educación superior. Aunque muchos ingresan al Sena, todavía no hay evidencia de que logren superar el desempleo, que en esa franja de bachilleres es lo que más les preocupa a los expertos. 

Uribe no supo cambiar de énfasis en su segundo gobierno y su afán por la reelección lo enredó en un camino de clientelismo y politiquería que lo alejó de sus propias metas.